90 AÑOS DE MÚSICA EN VENTA DEL MORO
Autor: Ignacio Latorre Zacarés

La banda de música es un elemento imprescindible en todo pueblo que se precie de serlo. Venta del Moro goza desde hace 90 años de su propia banda que ha amenizado las fiestas, procesiones, pasacalles y acontecimientos culturales del pueblo y sus aldeas. Durante este largo periodo de tiempo, muchos esforzados venturreños han dedicado parte de su tiempo libre a aprender música para así lograr que el pueblo pudiera disfrutar de una de las artes universales más gratificantes. La afición por la música ha sido una constante en nuestro pueblo y con alguna pequeña interrupción, siempre han habido aficionados que han hecho un aparte de su poco tiempo de ocio para ofrecer al pueblo un motivo de orgullo y satisfacción. De los pioneros a la actualidad existe una línea continua y ascendente que marca una muy favorable evolución de la banda. Actualmente, la Unión Musical cuenta con una banda mayor y otra juvenil de 71 miembros entre ambas, una fuerte implantación en todas las familias del pueblo ya sea por ser músicos o socios gran parte de sus miembros, un presupuesto consolidado, su propio local, una escuela de educandos y sobre todo una seriedad y buen hacer que le han convertido en una enseña brillante del pueblo.

LOS ORÍGENES
Efectivamente, 1909 parece ser la fecha en que se fundó la banda, aunque no haya un documento escrito o gráfico que lo atestigüe, pero las evidencias apuntan a esa fecha. Detrás de toda gran empresa hay siempre una persona que es la encargada de llevar la iniciativa y animar al resto de personas para llevarla a cabo. En este caso fue D.Millán Pardo Medina, funcionario del Ayuntamiento venturreño, quien animado por D.Pedro Martínez, director de la Banda de Música de Utiel, logró formar una banda de más de 40 miembros en nuestro pueblo (todos ellos hombres). Como se puede imaginar, esto suponía una gran cantidad de esfuerzo en unos tiempos donde el trabajo era muy duro, el dinero no sobraba y el analfabetismo aún era una de las plagas de la España rural. Sin embargo, el empeño, don de gentes y entusiasmo de Millán Pardo logró reclutar entre campesinos y trabajadores venturreños a una nutrida banda musical.
En la comarca, Requena ya había fundado su banda, la "Artística Requenense", en 1886 y al año siguiente surgiría otra banda denominada "El Progreso". En Caudete de las Fuentes, entre 1894 y 1902, surge la Banda de Música "El Ángel". También a principios del siglo XX aparecen en Utiel dos bandas : "La Primitiva Utielana" y "La Armónica". En Camporrobles, un documento fechado el 18 de marzo de 1918, habla ya de la "Banda La Armónica" y en 1951 se funda la actual "Unión Musical Mar-Chica".
Siguiendo con nuestros pioneros, estos eran 48 músicos, como bien ilustra la anécdota de que cuando se jugaba a lo que actualmente llamamos "bingo" y antes se decía "lotería", cuando salía el número 48 se gritaba al unísono "¡La Banda de Venta del Moro !". Tal era el entusiasmo que se mostraba por el arte musical. Incluso el padre del músico Ramón Cantorné vendió unos olivos en el paraje de la "Cruz de Ana López" para pagar las 60 pesetas que valía el clarinete de su hijo. Mientras tanto, el director, D.Millán Pardo, no dejaba que ningún músico dejara de asistir a los ensayos.
Los componentes de la banda inicial eran los siguientes :
- Director : Millán Pardo Medina
- Flautín : Indalecio López y Manuel Pardo.
- Flauta : Primitivo García y Francisco Iranzo "Chacón".
- Clarinetes : Andrés Descalzo "Colorao", Aurelio Haba "Cómico", Lucio Moya "Arenas", Ceferino Latorre, Heliodoro López Alarte, Ramón Cantorné, Ángel "Juan Rabo".
- Saxofones : José María Yeves "Cabuchas", Federico Forano, Mariano Castillo y Antonio Iranzo.
- Requintos : Francisco Ruiz "Paco el Curro" y Gumersindo Descalzo.
- Bombardinos : Saturnino Beltrán "El tío Ico", Bonifacio García "el del Tío Sabino" y Raimundo.
- Bajos : Crisanto López, Juan José Martínez "El Anciano", Miguel Hernández "Cuelgues".
- Trombinos : Amancio Pardo, Victorio Latorre, Aurelio Iranzo, Ángel Haba y Miguel Haba "Roda".
- Cornetines : Julio Pérez García "El Molinero", Mamerto Pérez, Facundo Moya "Facundín" (padre e hijo), Facundo García, Eugenio Cárcel, Alejandro López "Chasquitos".
- Trombones : Inocente García "el del Tío Sabino", Julián Ponce "Ollero", Vicente González "Pijín", Constantino López.
- Trompas : Leopoldo Castillo y Antonio Pérez "Gallina".
- Fliscornos : Emilio López y Emilio Yeves.
- Caja: Tomás Haba Villanueva "Mata"
- Bombo : Teófilo García.
- Platillos : Pedro Juan Peralta "Gallina" y Eulogio Moya "Rata".
- Triángulo : Manolo Pardo.
- Hierrecillos : Crescencio Ochando.
- Papelero : Nicolás Yeves "Colache".
Como se puede observar era una banda fundamentalmente de viento. Además de amenizar lo festejos del pueblo, se salía a tocar también a pueblos de los alrededores (Caudete, Villamalea, etc.). Entre su repertorio se encontraba una misa solemne y una salve a la Virgen de Loreto, compuestas ambas piezas por el director de la banda de música de Utiel D. Pedro Martínez, y también pasodobles, algunos compuestos por el propio Millán Pardo, "De la Picota al Parchel" y "El bocoy de vino tinto", y también de otros autores como "El abanico y el magiar". La afición era tal que por ejemplo Miguel Hernández "Cuelgues" venía desde su tejería de las Casas del Rey con su instrumento (el bajo) a cuestas y dejando a la mujer y los niños solos en el caserío donde vivían.
A principio de los 20 la banda dejó de tocar por un breve espacio de tiempo, pero en 1925, el ya nombrado Francisco Ruiz "Paco el Curro" consiguió unir a componentes de la vieja banda y a nuevos músicos que tocarían durante un corto periodo de tiempo (tres o cuatro años). Entre los nuevos componentes aparecían Nicolás Moya al fliscorno, Nicolás Játiva con el trombino, Julio Moya al clarinete, Ricardo Cólliga con el clarinete, Emiliano Yeves "Chato" al trombón, Cecilio Campos al requinto, Fidel Cárcel con el clarinete, Francisco Gómez "Quicorro" bajo y cornetines Antonio Martínez "Rocha", Marcelino Sáez y Emilio Martínez "El Sergio". Emilio "El Sergio" fue un personaje singular venturreño ya que amenizó bailes, zarzuelas y comedias con su acordeón e incluso compuso algunas obras. Fue director musical del grupo de teatro venturreño, cuando éste representaba zarzuelas, hasta 1966. Su presencia fue fundamental tanto en la banda de música como en el grupo de teatro.
En 1928, Francisco Iranzo "Paco Chacón", viene de Valencia para reorganizar la banda con viejos componentes y savia nueva aportada por la escuela de educandos. Así entre los jóvenes encontramos a Feliciano Antonio Yeves (cronista oficial, cuyo libro y memoria nos sirve para ilustrar los comienzos de la banda) a la trompeta junto con Loreto Martínez ; Lucio García "Villarta" a la flauta ; clarinetes Nemesio Cárcel, Manuel Iranzo, Julián Cervera y Andrés Peralta "Gallina" ; Rafael Cárcel al saxofón ; los hermanos Francisco y Emilio Cano Iranzo al bombardino y hierrecillos ; Julián Iranzo "Javelico" al bombo ; Manuel Ruiz (hijo del director) ; Eulogio Moya "Rata" a los platillos ; Heliodoro Ruiz clarinete ; Ramón Borja "Totovía" a la caja ; Manuel Pedrón "Lobo" con el trombón ; Pedro Valero "el de la tía Paca" trombino y Antonio Mombiedro al saxofón. Éste último también ejerció como director de la banda. El papelero era Desiderio Haba "Mata".
El tío Paco Chacón consiguió con su paciencia y buen hacer una banda más o menos armoniosa, pero debido a su muerte, la banda buscó a nuevos directores. Así antes de la Guerra Civil, se dividió la banda en dos grupos. Unos seguían a Antonio Mombiedro "El Boticario" y otros a Aurelio Haba "El Cómico". Éste último fue actor profesional en Valencia, pero volvió al pueblo estando presente tanto en el grupo de teatro como en la banda de música. Este fenómeno de división de la banda fue frecuente en aquella época y sucedió también en otros pueblos. En Requena tocaba la Unión Musical Requenense "Los Pamblancos" y el Fomento del Arte "Los Pistoleros". También en Utiel hasta 1940 en que se fusionan en la actual Unión Musical eran dos bandas las que ejercían la rivalidad musical : "La Primitiva Utielana" y "La Armónica".
Emilio Clemente nos ha facilitado una foto datada entre 1934-35 en la que aparecen los siguientes componentes uniformados de la banda : Aurelio Haba como director ; Nemesio Cárcel, Julio Moya, Loreto Martínez, Manuel Pedrón, Cecilio Campos, Lucio García, Rafael Cárcel, Nicolás Játiva, Julián Salinas, Nicolás Moya, Francisco Gómez, Julián Iranzo, Andrés Haba, Antonio Martínez "Rocha", Emilio Cano a los hierrecillos, Feliciano Antonio Yeves, Lucio Moya, Emilio Iranzo, Ramón Borja, Fidel Cárcel, Emiliano Yeves "Chato" y como papelero Desiderio Haba.
LA POSGUERRA
La guerra civil (1936-39) supuso un negro paréntesis en la actividad de la banda al igual que ocurrió en muchas de las actividades culturales de la época. Tras la Guerra Civil y a pesar de los graves problemas económicos que trajo consigo la posguerra, el movimiento cultural venturreño emerge con nuevas fuerzas. En el teatro se seguían representando zarzuelas como Conchín Ochando "Periquina" en "La Rosa del Azafrán" ; Eloína Yeves y "El Tururú" y también potentes voces masculinas como Pascual Domingo, Raúl Martínez, Prudencio Gómez "Chinche" y otros que interpretaban "Agua, azucarillos y aguardiente", "La del manojo de rosas" y otras. También el baile o más bien "beile" era uno de los pocos divertimentos en esta dura época y se celebraba en el pueblo y aldeas. Estos consistían generalmente en un acordeón (entre otros el de Emilio "el Sergio") y las ganas de bailar de las parejas. También señalar la contribución de los hermanos Lucio y Gervasio Pérez como instrumentistas en tradiciones como los mayos. Lucio ha sido el último tocador de violín del pueblo y Gervasio tocaba la guitarra en la forma de acompañamiento por el tres, forma poco habitual en nuestra comarca.
También en 1940 se reorganiza la extinguida banda de música con viejos y nuevos componentes. Para esta labor fue llamado como director D.Juan Blasco Guaita de Villargordo, que estuvo ejerciendo como director bastantes años. Se tocaba en fiestas patronales, toros, procesiones, Semana Santa, el Corpus, etc. También se salía a festivales donde se buscaban refuerzos humanos de otros lares, lo que una vez les costó una denuncia. Se realizaron 3 o 4 conciertos en Requena e incluso se acudió ya entonces a las Fallas de Valencia, concretamente a la de la Olivereta. También se tocaban en las aldeas venturreñas en el día de Santa Cecilia (patrona de los músicos) en las que se compraba para la ocasión un cordero que era degustado por los músicos. En Jaraguas también estuvo presente cuando el obispo consagró la Iglesia jaragüeña. Reseñamos que durante esta época también Jaraguas tuvo su propia banda formada por jóvenes escolares gracias a los esfuerzos de un maestro de la aldea.
Eran tiempos de escasez, donde con mucho esfuerzo y afición, los esforzados venturreños tocaban sus rudimentarios instrumentos que de cuando en cuando eran sufragados por el Ayuntamiento. Algunas veces los instrumentos eran comprados por los propios músicos como José Pérez Cárcel que pagó 33 duros de la época por su clarinete. Los traslados no se efectuaban en los modernos autobuses actuales, sino en el camión del Tío Mario López "el de Liso". La banda incluso tenía su uniforme lo que no era "moco de pavo" en estos tiempos.
Por una foto de 1943 aproximadamente, facilitada por José Pérez, aparecen uniformados los músicos siguientes : Juan Blasco (director) ; Fidel Cárcel (clarinete), Victorio López (clarinete), Ricardo Martínez (clarinete), Cecilio Campos (requinto), Miguel Nohalés Defez (flauta), Manuel Pedrón (trombón), Emilio Yeves (trombón corto), José Pérez (clarinete), Manuel Martínez "Rocha" (trompeta), Alberto Moya (clarinete), Gerardo Gómez (papelero), Antonio Nohalés (trompeta), Feliciano Antonio Yeves (trompeta), Emilio "el de la Chacona" (bombardino), Eulogio Moya (bombo), Miguel Augusto Moya (estupendo saxofón que posteriormente fue director de la banda), Francisco Pardo "Litri" (saxofón), Ramón Borja "Totovía" (caja), Francisco Gómez (trombón) y Emilio Iranzo (bombardino).
LOS 50 Y 60
La banda continuó amenizando los festejos venturreños, a pesar de que el presupuesto era muy menguado o inexistente, los instrumentos rudimentarios y durante muchos años se careció hasta de uniforme. Era la pura voluntad y afición desinteresada de los integrantes de la banda los que consiguieron mantener la afición en el pueblo. No se acudió a certámenes y simplemente se tocaba en el pueblo. Tras bastantes años en la dirección, Juan Blasco Guaita cedió la batuta en 1956/57 a su antiguo discípulo Augusto Moya Pérez "Miguel el de la tía Basilisa", natural de Venta del Moro y saxofón, que ejerció su magisterio durante años, pero que por motivos de trabajo tuvo que dejar el pueblo. Ante este hecho, volvió a dirigir la banda hasta su defunción en los 70 D. Juan Blasco Guaita.
A finales de los 50 encontramos una banda con antiguos componentes (algunos anteriores a la guerra) y nuevos alumnos que mantuvieron en pie la banda durante bastantes años. Entre los veteranos se mantenían en activo : Eulogio Moya (platillos), Francisco Pardo "Litri", Miguel Nohalés (flauta), Emilio Martínez (bombo), Ramón Borja, Miguel Moya (director) o Desiderio Haba como papelero. Pero también aparecen nuevos componentes como el clarinete bajo José Fernández Descalzo. José Fernández con sus 58 años continua en la banda como miembro más veterano de ella. Desde su primera salida el 26 de octubre de 1958, con motivo del entierro de D.Gerardo López García, padre de su amigo íntimo Rafael López, también clarinete, ha permanecido sin interrupción en todas las formaciones musicales y sigue siendo una importante pieza en el funcionamiento de la banda, no sólo como músico, sino también como secretario que lo es desde 1983. Su entera y altruista dedicación a nuestra banda lo han convertido en un pilar fundamental de ella. Otros miembros que se incorporan y que continuarían tocando en la banda durante décadas son Isaías Moya con su trompeta, Rafael López García al clarinete y requinto y Vicente Monsalve con el saxofón. La lista continua con otros nombres como Florencio Leal (bajo), Julián Nohalés (bombardino), Alejandro Gómez "Jandri" incorporado en 1962, Adolfo Gabaldón, Emilio Borja, Ricardo Martínez, Ángel Fernández, Miguel Márquez, Emilio García, Luis Martínez (clarinete), Antonio Martínez (friscorno), Adolfo Sáez (trompeta), Jesús Pérez Haba (trompeta), Carlos Moya (trombón) y algún otro que no recordamos.

LOS 70 Y LOS CLEMENTES
Ya desde finales de los 60 surge la figura del presidente en la banda de música, cargo que hoy es imprescindible debido a la complejidad que hoy en día supone llevar a buen puerto esta empresa. Este cargo recayó en Leopoldo Emilio Clemente López, gran aficionado a la música y quien durante 23 años, hasta 1991 concretamente, se mantuvo como presidente de la banda, además de otros 4 como vicepresidente. Su labor presidencial esforzada y desinteresada ha sido reconocida en varios homenajes como el realizado por la Unión Musical Utielana el 16 de septiembre de 1989 o el realizado en Venta del Moro en 1994. Pero además, por decisión consensuada, durante 6 años ha actuado como Delegado Comarcal de la Federación de Bandas de Música. Su amor por la música le ha valido el reconocimiento de todo el mundo musical comarcal y hoy en día se sabe que cuando se habla de "Clemente" en la comarca se habla de música.
Se habla de música porque Emilio Clemente sólo es la punta del iceberg, ya que toda la extensa saga familiar (sin excepciones) ha estado implicada en la banda venturreña. Incluso su hijo Luis Clemente con 9 años ya empezó a tocar el trombón. Le seguirían todos sus hermanos : José Emilio (como abanderado y bombo desde los 80), Javier (caja), Juan Carlos (bajo), Fernando (caja), Evangelina (clarinete) y Armando. Pero no acaba ahí la saga, porque incluso su esposa Angelina Domingo ha sido madrina de la bandera desde su institución en 1983 hasta tiempos recientes. También varias nueras de Emilio Clemente han contribuido o contribuyen al sostenimiento de la banda como Victoria Yeves (clarinete), María Ángeles Gómez (clarinete) y Sara Pérez (saxo tenor). Incluso, últimamente han ingresado dos jovencísimos nietos en la banda (Jonhatan y María Clemente).
Los Clementes llevan la música en la sangre y uno siempre recuerda como su amigo Fernando Clemente aprovechaba cualquier soporte físico (una mesa, tabla, silla, etc.) y a cualquier hora para ejecutar un redoble de tambor. La contribución de esta familia ha sido tal que D.José Salvador González Moreno, director de la Banda Militar Maestrazgo de Valencia creó el pasodoble "Los Clementes" que fue tocado por la Banda Musical de Barx en Venta del Moro en 1995.
La relación de los Clemente con la música ha continuado en el campo profesional, ya que han sabido combinar sabiamente su conocimiento de la madera (todos trabajaron en la carpintería) y el de la música para convertirse en unos acreditadísimos afinadores de pianos con su propia empresa (Clemente Pianos) establecida en Valencia y Castellón en la que trabajan Luis, Javier, Juan Carlos, Fernando y Armando. Han recibido primeros premios como afinadores de piano en Alemania, además de ser su trabajo reclamado por los mejores profesionales del piano. El Palau de la Música de Valencia es uno de los ámbitos de trabajo habituales de su empresa. También Luis Clemente ostenta el mérito de ser el único afinador de arpa de España gracias a su especialización efectuada en Chicago.
La dedicación intensa y desinteresada de la familia Clemente-Domingo a la banda venturreña es muy de agradecer por todo el pueblo. Además, el amor a las raíces de esta familia y su vocación venturreña hace que trabajen donde trabajen estén completamente vinculados al pueblo y que sigan ofreciéndonos durante la Semana Cultural estupendos recitales musicales nocturnos con profesionales de gran valía. Gracias a todos ellos.
Durante los 70 la banda comienza una progresión ascendente, prolegómeno de la época actual cuando la banda está en su mejor momento. Se ensayaba en un local municipal cercano a la Iglesia (el viejo bar de los jubilados) y a principios de los 70 se volvió a acudir a las Fallas de Valencia concretamente a la Falla de Torrente, de la c/ Sueca (dos años) o la c/ Sagunto donde por cierto los despidieron por no llevar uniforme. Desgraciadamente murió el director D.Juan Blasco Guaita, que fue director de la banda desde 1940 y que se reincorporó tras la marcha de Miguel Moya. Ante el lamentable hecho reseñado, se decide por votación democrática entre los músicos entregar la batuta de dirección a D.Miguel Nohalés Defez que continuaría en el cargo hasta 1983. Miguel Nohalés (recientemente desaparecido) también ha sido un bastión fundamental en la banda venturreña. Lo vemos aparecer en la banda tras la guerra civil junto a su hermano Antonio y desde entonces destacó como un gran virtuoso de la flauta (lo que le valió el sobrenombre de "El Flauta"). Gracias a su paciencia y buen hacer la banda tomó nuevos bríos y muchos jóvenes (Luis Clemente, José Luis Moya, Miguel Nohalés -hijo-, Tomás, etc.) le dieron un importante impulso a la banda. Para darse una idea del coste económico de sostenimiento de la banda en aquel entonces, valga la referencia de que en 1976 se produjeron unos ingresos de 203.401 ptas. y unos gastos de 116.610.
Otro hecho fundamental a reseñar es la aparición en 1971 de las primeras féminas en la banda, concretamente Victoria Yeves Moya y María Carmen Yeves Moya (que no son hermanas). Para ello tuvieron que superar algún disgustillo propio de la atmósfera machista de la época, ya que a pesar de cumplir con sus clases de solfeo como cualquier otro, les estaba vedado el paso a la banda por la creencia de que se les "deformaría los labios". Su entereza y constancia les hizo superar estos incoherentes prejuicios y fueron las pioneras venturreñas en la banda. Incluso había quien se sorprendía al comprobar que les hacían sonar a los instrumentos. Cómo cambian los tiempos ya que 28 años después la banda tiene un elevado componente femenino.
En 1977 nos encontramos con una banda menguada, pero ya con importantes incorporaciones jóvenes que labrarían un futuro muy esperanzador en la banda. La plantilla era la siguiente :
Director : Miguel Nohalés Defez.
Presidente : Emilio Clemente.
Percusión: Francisco Gómez López (bombo), Eulogio Moya Yeves (platillos) y Javier Clemente Domingo (caja).
Bajo : Florencio Leal Gómez y Juan Carlos Clemente Domingo.
Trombones : Luis Clemente Domingo y José Manuel García Moya (en activo).
Trompa : Gerardo Fuentes García.
Bombardinos : Alejandro Gómez Moya y Jesús Leal Gómez (en activo)
Saxo tenor : Emilio Lavarías Martínez.
Saxos altos : Francisco Pardo Trujillo, Vicente Monsalve Gómez, Julio Moya Giménez y Carlos Mercado.
Fliscorno : Francisco Yeves Moya (en activo).
Trompetas : Isaías Moya González y Miguel Nohalés Olmo.
Clarinetes : José Fernández Descalzo (en activo), José Antonio López Cárcel, Victoria Yeves Moya, Mª Carmen Yeves Moya, Piedad Gómez Martínez, Rafael García Gómez y Evangelina Clemente Domingo.
Oboe : Luis Rafael Latorre Navarro.
Requinto : Rafael López García.
Papelero : Joaquín Pardo Trujillo.
LOS 80
En los 80 la consolidación y progresión de la banda es cada vez mayor. No pararán de entrar nuevos músicos, cada vez habrá una mayor presencia en certámenes musicales, se mejora la calidad de instrumentos y se cuenta con presupuestos más competentes.
Entre los que se incorporan encontramos a Enrique Murcia Murcia, José Emilio Clemente, José García, Vivián García, Julio Moya Martínez y otros. Continuaban además la familia Clemente en pleno y músicos muy veteranos (José Fernández, Isaías Moya, Vicente Monsalve, Rafael López) junto con los incorporados a finales de los 70 (Jesús Leal, José Antonio López, Francisco Yeves, José Manuel García, Luis Rafael Latorre, Mª Carmen Yeves, Piedad Gómez, Julio Moya Giménez y otros). Todos ellos dirigidos por la sabia batuta de Miguel Nohalés, hasta que en 1984 fue relevado por D.José Luis Casadó del Campo. José Luis Casadó era natural de Cheste y había dirigido anteriormente las bandas de Tibi (Alicante) y Villamarchante (Valencia) y permaneció en nuestra banda hasta julio de 1996.
Una de las citas anuales eran las fallas, acudiendo a las falla de la Plaza del Árbol, c/ Albacete o Luis Oliag (1981-82). También se hacían certámenes en los pueblos de alrededor y se acudió al homenaje en la Plaza de Toros de Valencia al Maestro Serrano en 1985. Por iniciativa del entonces presidente Emilio Clemente y el presidente de la banda de Villargordo, en agosto de 1980 se realiza un festival con otras bandas comarcales (Caudete, Camporrobles, etc.) que se continuó en años sucesivos. Otras salidas de la banda son a Aldaya (1982), Millares (1985), Cheste (1986), Villamarchante (1988) y a pueblos de alrededor como Camporrobles (1980), Caudete (1981), Villargordo (1987), Utiel (1989), etc.
En agosto de 1983, se constituye una nueva directiva bajo la presidencia de D. Leopoldo Emilio Clemente (que ya venía ejerciendo este cargo durante muchos años). Se elaboran los estatutos de la Asociación Cultural Musical (posteriormente Unión Musical) que serán aprobados por el Gobierno Civil de Valencia en 8 de noviembre de 1983. La nueva Junta Directiva hizo una campaña casa por casa de captación de socios, hasta llegar a una cifra superior a 200 (la mayoría de ellos aún permanecen). Se dota a la banda de bandera en 1983, amadrinándola Angelina Domingo y portándola José Emilio Clemente. Los presupuestos seguían creciendo y de las 315.000 ptas. de ingresos de 1980 se pasaba a 1.922.000 ptas. de 1989.
LOS 90 O EL APOGEO DE LA BANDA
Los 90 han supuesto el gran auge de la Unión Musical de Venta del Moro. Nunca hasta ahora se había llegado a tan elevado número de músicos y a los niveles de calidad que registra en la actualidad. Los 90 suponen una masiva incorporación de jovencísimos músicos que han revigorizado a la banda y le han dado un prestigio hasta ahora nunca alcanzado. Para llegar a ello se ha contado con una escuela de educandos subvencionada por la Diputación de Valencia, unos presupuestos mucho mayores y el gran esfuerzo de muchos jóvenes que compaginan sus estudios con clases de conservatorio. La banda tiene un perfil claramente joven (muchos de ellos no alcanzan los 20 años) y la incorporación de mujeres ha sido enorme. El instrumental es ahora mucho mejor, se cuenta con un local propio en frente de la rambla Albosa y para sustentar el importante gasto que genera la actividad musical se acoge a subvenciones de la Diputación de Valencia, Generalitat Valenciana, Ayuntamiento y las cuotas de los socios (250 aproximadamente que pagan 2000 pesetas al año), además de los típicos ingresos de loterías.
El nivel alcanzado y la elevada cantidad de músicos ha hecho posible incluso la división de la banda en una formación senior y otra juvenil. Las salidas siguen siendo una constante de nuestra banda y entre otras se han efectuado las siguientes : Tibi (Alicante), La Gineta (Albacete), Mogente (1992), Barx (1994), Minglanilla (Cuenca-1994), Jarafuel (1995), Requena (1996), Sinarcas (1996), Estadio Mestalla de Valencia (1996), Alborache (1996), San Clemente (Cuenca-1997), Camporrobles (1997), Villa del Prado (Madrid-1997), Villarrobledo (Cuenca-1998), etc. En septiembre de 1993 se celebró en la plaza de toros de Venta del Moro un macroconcierto realizado por una gran número de músicos de bandas comarcales que tocaron conjuntamente con motivo del XXV aniversario de la fundación de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana. Éste ha sido uno de los grandes eventos musicales acaecidos en nuestra tierra. Muy meritoria fue también la participación de la Unión Musical en el XX Certamen Provincial de Bandas de Música, organizado por la Diputación de Valencia, el día 15 de junio de 1996, actuando en el Palau de la Música de Valencia y obteniendo el sexto puesto. Por supuesto, la banda sigue siendo el elemento imprescindible en todas las fiestas del pueblo (presentación, pasacalles, ofrenda, procesiones) y ha incrementado sus actuaciones con conciertos de invierno, primavera y en la Semana Cultural. Además, cada año se acude por lo menos una vez a cada una de las aldeas venturreñas en sus fiestas patronales. A esto se añade las numerosas veces que se acude a certámenes de otras zonas y por supuesto la celebración del día de su patrona, Santa Cecilia, con pasacalle, misa, comida y juerga. Las Fallas siguen siendo una de las visitas obligadas, aunque en 1999 ésta no se produjo.
También la directiva ha tenido mucho que ver en el progreso realizado. Los componentes de la directiva ha incrementado mucho en número para poder llevar a buen puerto una actividad que genera mucho trabajo. Hasta principio de los 90 ejerció como presidente Emilio Clemente López quien fue relevado por Julio Cervera Ruiz en 1992 y posteriormente éste ha sido sustituido desde 1995 por Ángel Gómez Moya, ayudado por Gerardo Cañigral como vicepresidente y director de la escuela de educandos y José Fernández Descalzo como secretario.
Los presupuestos han crecido aceleradamente para poder sostener el nivel cuantitativo y cualitativo de la banda. De las 203.000 ptas. de ingresos generados en 1976 se ha pasado 23 años después a los casi 6 millones presupuestados para 1999 (5.922.317 ptas.). El salto es muy importante en los últimos años, ya que se ha pasado de 2.426.951 ptas. en 1992 a los ya comentados casi 6 millones de 1999. Además se cuenta con un patrimonio de 3.849.039 ptas. a fecha de 31 de diciembre de 1998 dividido en los capítulos de instrumental (3.370.000 ptas.), material (341.000 ptas.) y uniformes (137.000 ptas.).
Como hemos comentado, el aumento del nivel de calidad de la banda se debe a los muchos músicos que aparte de los ensayos profundizan sus estudios en el conservatorio. Incluso algunos han acabado su carrera y ya han adquirido nivel profesional como José Vidal López y otros tocan en orquestas (José Antonio López Márquez, antes también Julio Moya Giménez) o dan clases a educandos (Marta y Gerardo Cañigral). También parte de los músicos constituyeron desde hace varios años una charanga con la que actúan en fiestas de Venta del Moro y otras localidades. Hasta julio de 1996 ejerció como director el ya mencionado José Luis Casadó, que sería sustituido en estas fechas por José Clemente Bueno, natural de Alborache y trombonista de la Banda de la Policía Nacional que ha realizado varios cursos de dirección.
En Venta del Moro han sido muchos los escenarios en que se ha tocado : el local de la cámara agraria, el patio de las escuelas, la Plaza de la Iglesia, la Glorieta y últimamente en la nueva Casa de la Cultura, inaugurada en 21 de junio de 1998. El repertorio se ha ampliado muchísimo como consecuencia de la calidad conseguida. Marchas, serenatas, suites, sinfonías junto con obras de los Beatles, Vangelis o repertorio popular (pasodobles, etc.). En 1998 se incorporó por primera vez la figura de musa de la banda que recayó en Rosa Isabel Iranzo y las damas (Mª Ángeles Gómez y Pepi Murcia)
El pueblo es consciente de la buena marcha de la banda y está profundamente orgullosa de ella como se muestra en el elevado número de socios y la amplia expectación que generan sus conciertos. Pasamos a detallar la larguísima lista de componentes (71) que hacen posible el buen funcionamiento actual de la banda. Comprobaremos que junto a nombres ya referenciados anteriormente, se constata el gran número de incorporaciones efectuadas en los 90 y la gran aportación de los componentes femeninos (42).
Componentes Unión Musical (banda senior y juvenil) 1999 :
Presidente : Ángel Gómez Moya.
Director : José Clemente Bueno.
Percusión : Julio Moya Martínez (timbales), Fernando Clemente Domingo (caja), David Gómez García (caja), José Emilio Clemente Domingo (platos), Laura Gómez Martínez (Bombo), Adrián Martínez Betancor, María Clemente Ochando.
Flautas : Nuria Fernández Hernández, Belén García Ponce, Laura Martínez Murcia, Sara Descalzo Montés, Mónica Talavera Huerta.
Oboes : Marta Cañigral Cárcel, Ana Garrido Blasco, Silvia Latorre López.
Requinto : Cristina López García.
Clarinetes : José Fernández Hernández (bajo), Gerardo Cañigral Cárcel, José Luis López García, Irene Cañigral Cárcel, Yeisa Martínez Betancor, Mª Ángeles Gómez García, Mª José Murcia García, Rosa Iranzo García, Mª Luisa Gabaldón Pérez, Mónica López Berlanga, Mª Luisa Descalzo Montés, Esther Moya Yeves, Verónica Cárcel Gómez, Pilar Mª Cervera Lavarías, África Gómez Yeves, Raquel Huerta Cárcel, Cristina Monteagudo Moya, Lorena Nohalés Blasco, Gema Ruiz Murcia.
Saxos en mi altos : Mª Isabel Navarro Cortijo, Erika Hernández Sáez, Laura Gómez Gil, Inmaculada Huerta Cárcel, Almudena Pardo Yeves, Laura Hernández Haya y José Vidal López Berlanga,
Saxos tenor : Sara Pérez González, Verónica Navarro López, Raquel Ruiz Murcia y Pilar López Pérez.
Saxo barítono : José Antonio López Márquez.
Trompas : Aurora Fernández Hernández, Celia Haya Fernández y María Cañigral Cárcel.
Fliscornos : Pablo Cervera Lavarías y Efraín Martínez Betancor.
Trompetas : Carlos Cervera Lavarías, Raquel López García, Francisco Yeves Moya, Luis Miguel Latorre López, Javier Pardo Yeves, Daniel Cárcel Latorre, Elia García Vera y Jenifer García Olmo.
Trombones : Jesús Leal Martínez, José Manuel García Moya, Jorge Talavera Huerta, Rubén Ruiz Fuentes y Jonhatan Clemente Ochando.
Bombardinos : Manuel Pérez González y Sergio Garrido Blasco.
Tubas : Jaime García Ponce y Manuel Francisco Gómez.
Abanderado : José Fernández Hernández.
Todos ellos, junto a los directivos y socios han contribuido a que la Unión Musical ostente un dignísimo nivel y albergue un futuro muy esperanzador, dado el elevado nivel de juventud de la banda y el buen funcionamiento de la escuela de educandos. Seguro que en el año 2.009, cuando la banda cumpla cien años, nos seguiremos sintiendo orgullosos de aquellos pioneros venturreños que con un caño hacían música y de las largas generaciones de familias (Nohalés, Clemente, Fernández, López, Yeves, Gómez, Moya, Cervera, Lavarías, García, Pardo, Ruiz, Borja, Descalzo, Martínez, etc, etc., etc..) que con gran afición y actitud desinteresada y altruista han regalado durante años su arte musical. Ruego perdonéis alguna omisión involuntaria entre los cerca de 200 músicos que han desfilado por este artículo.
Informantes : Emilio Clemente, José Fernández, José Pérez, Nemesio Cárcel, Victoria Yeves, Alejandro Gómez, Enrique Murcia, José Manuel García, Angelina Domingo.
Bibliografía : Yeves Descalzo, F.A. Geografía e Historia de Venta del Moro. Venta del Moro, Ayuntamiento, 1977.
Yeves Descalzo, F.A. "Una saga musical : la familia Clemente Domingo". En : Requena Musical. Requena, Sociedad Musical Santa Cecilia, 1998.
Artículos del periódico "El Mundo" sobre la bandas de Requena, Utiel y Camporrobles.
García de Fuentes, Luis y García Ejarque, Luis Caudete de las Fuentes ayer y hoy. Caudete de las Fuentes, Ayuntamiento, 1993.
Latorre Zacarés, Nacho "Historia del teatro en Venta del Moro", en El Lebrillo Cultural, n.5, mayo 1997.

Evolución de los presupuestos de la banda de música (en ptas.)

Año Ingresos Gastos
1.976 203.401 116.610
1980 315.554 213.593
1983 623.654 142.861
1.986 1.542.483 1.091.855
1.989 1.922.307 1.154.356
1.992 2.426.951 1.548.880
1.995 2.200.053 1.951.841
1.998 3.804.859 3.431.042
1.999* 5.922.317 5.922.317
* Presupuestado.

Asociación Cultural Amigos de Venta del Moro

Lebrillo 11